¿Puede un animal sentir tristeza?

     Me encontraba en la localidad cacereña de Gata, el pueblo en el que crecí. Estaba fotografiando la zona que había arrasado el último incendio. Muy frecuentes en los últimos años, estos incendios están haciendo desaparecer los bosques que recorría cuando era niño. Tras el gran incendio de agosto de 2012 quedé muy tocado emocionalmente, y cada vez que vuelvo algo me oprime el pecho al pasar por las laderas desnudas que hace unos años estaban pobladas por un tupido manto de árboles.


     Este año otro incendio considerable, pero mucho menos que el de 2012 arrasó una importante zona de pino y armándome de valor cogí la cámara. Con la intención de hacer referencia a estos incendios en el artículo que escribo en Septiembre en www.elpaisajeperfecto.com estaba fotografiando la desolación de un bosque de troncos negros y suelo de ceniza.


     Estuve un rato vagando, más conmocionado que concentrado en disparar hasta que encontré este gran pino. Traté de buscar una perspectiva que transmitiera su tamaño por eso me agaché junto al tronco y permanecí un rato inmóvil: volteando la cámara, buscando ángulos....

     Me llamó la atención un ruido a mis espaldas, en un primer momento pensé que se trataba de hojas secas cayendo de las ramas quemadas. Otra vez el ruido de las hojas y me giré para comprobar de qué se trataba: un corzo.

    Disparé un esta fotografía e inmediatamente me quedé mirando cómo el animal cruzaba cabizbajo aquel escenario dantesco.


     Disfrutando de la sensación de observarle sin que advirtiera mi presencia se fue alejando en aquel paisaje desolador, cabizbajo, olisqueando cada varios metros el suelo. Cuando desapareció una pregunta vino a mi mente: ¿puede un animal sentir tristeza?



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Comentarios: 1
  • #1

    J.decastro (jueves, 06 agosto 2015 13:59)

    Muy interesante la entrada, emotiva y reflexiva... Es indignante la falta de respeto y sensibilidad de las personas que provocan estos infiernos.